“Convierte tu hobby en tu profesión y nunca trabajarás”, está frase comienza a resonar mucho cuando estamos a punto de pasar a la universidad y aún no estamos seguros de a qué dedicarnos. También aplica cuando ya estamos trabajando y queremos tener un ingreso extra o simplemente queremos cambiar de aires profesionales, pero ¿Qué tan viable es esto?

Muchos de a quienes les gusta pasar tiempo en el gimnasio se vuelven entrenadores personales, a los que les gusta estar frente a una cámara se han vuelto youtubers, los que soñaban con viajar por el mundo ahora lo hacen con aerolíneas patrocinando sus posts de instagram y hasta los que adoran los videjouegos ya viven de hacer gameplays. La pregunta que nos deberíamos hacer a nosotros mismos es si seguiríamos disfrutando nuestros pasatiempos una vez que se vuelvan una obligación. Aquí sólo hay dos respuestas y nosotros te vamos a dar los dos lados de la historia para que te avientes a seguir haciendo lo que te gusta pero ahora de tiempo completo:

Pros

Es cierto que cuando disfrutas lo que haces tus actividades laborales dejan de ser un martirio, cuando sólo vas al trabajo por el dinero los días se vuelven un poquito miserables. Si te dedicas a algo que te trae alegría, déjame decirte que eres suertudo, seguramente eres de los que no odia los lunes, así que siempre busca las actividades que te gusten, no importa a lo que te dediques, se nota cuando a alguien le gusta lo que hace. Por sí mismo un hobby no es una actividad profesional, pero si logras mejorar tu técnica, como por ejemplo, tocar maravillosamente la guitarra, podrás convertirte en un profesional. Al dedicarnos a nuestro hobby podremos conocer actividades paralelas a él, como por ejemplo el marketing, la comunicación, la administración y otras cosas más que serán necesarias para que destaques en tu área.

Contras

Muchos de nosotros tenemos hobbies porque nos sirven como escapatoria de nuestra rutina diaria, nos relajan o simplemente nos entretienen. Los que tenemos la responsabilidad de trabajar lo hacemos porque es una fuente de ingresos, no podemos vivir de elogios y aplausos, tu trabajo te puede apasionar pero eso no hará que a veces te estrese. La gran diferencia es que si tu hobby es pintar y dejas una obra a medias no tendrás problemas con retomarla al siguiente mes, en cambio, si tu trabajo consiste en hacer ilustraciones no hay manera de que lo dejes a medias, lo tienes que entregar si o si, esa presión puede ser una carga y ya no querrás dedicarte a pintar en tu tiempo libre, porque todo tu día consistirá en hacer las mismas actividades.

Conclusión

Si vuelves algún hobby en tu trabajo podrás sentir la satisfacción de que te apasione lo que haces para vivir, pero siempre ten debajo de la manga otra actividad que funcione como tu pasatiempo, porque aunque nuestro trabajo nos encante siempre necesitaremos desconectarnos un rato para poder dar lo mejor de nosotros mismos al día siguiente. Si tienes muchas actividades como pasatiempos déjame decirte que ya tienes ventaja, elige una como carrera profesional y sigue disfrutando de las demás de vez en cuando.

Tags: , , , ,

¿Listo para mantenerte en la conversación?

Registrate a nuestro boletín y recibe lo mejor de educación y empleo.