No pasar el examen de admisión es la peor pesadilla de muchos, tal vez ya te habías imaginado siendo parte de la universidad con la que soñabas desde hace mucho, tal vez te la pasaste meses estudiando, hasta entraste a un curso, pero la realidad es que no hay lugar disponible para todos. En el momento que te dan la noticia puede sentirse como el fin del mundo, pero tranquilo, no es así. Tómate un rato de duelo y pon atención a las alternativas que puedes tomar en cuenta después de no haber pasado el examen de admisión.

Prepárate para el siguiente examen

Si estás decidido a entrar en esa institución y carrera en específico no te desanimes, entra a un curso para el examen de admisión e intenta sacar una puntuación más alta que en tu primer intento. Hay muchos lugares que se especializan en darlos, investiga cuál se acomoda mejor a tus necesidades y hazlo, puede ser pesado, pero no te vas a arrepentir. Es muy importante que mantengas tu mente activa y con los temas del examen bastante frescos en tu memoria.

Opta por tu segunda opción

Puede ser que no alcances el puntaje necesario para tu primera opción, pero sí para la segunda. No tomes decisiones desesperadas como cambiar de carrera para poder ingresar a la universidad de tus sueños sea como sea. Muchos piensan que una vez dentro volverán a tomar el camino que deseaban, pero la mayoría de las veces sólo estás alargando un proceso innecesariamente. Seguramente hasta quede más cerca de tu hogar y terminarás conociendo a personas extraordinarias.

Considera una universidad privada

Las universidades privadas no tienen por qué ser un sinónimo de colegiaturas exorbitantes, existen un sinfín de instituciones que cuentan con precios accesibles y excelente calidad académica, además de contar con una gran variedad de becas, ya sean académicas, deportivas o culturales. Estudiar en una universidad privada te puede ayudar muchísimo a crear relaciones

Entra a trabajar

No es necesario que encuentres un trabajo de tiempo completo, pero iniciar tu carrera profesional antes de ingresar a la universidad te va a dar ventaja en el mundo laboral dentro de unos años. Además, no es necesario que sigas trabajando durante tu carrera, pero sí te cambiará el chip y comprenderás muchas cosas que sólo pasan hasta que comienzas a laborar.

Estudia otro idioma o un oficio

Si aún no sabes si esperar al siguiente examen, entrar a una universidad privada o trabajar, puedes optar por seguir estudiando. Un segundo o tercer idioma siempre te abrirá muchísimas puertas, y si quieres poner a prueba tus habilidades culinarias, de carpintería, mecánica, etc. tomar clases o cursos de algún oficio te hará desarrollar habilidades que no sabías que tenías.

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